Tenía una relación un tanto extraña con este juego.

Mi primera partida fue hace casi diez años y lo jugaba a ratos en casa de unos colegas cada vez que iba a visitarles, por lo que no terminé de profundizar en todo lo que lo hacía especial.

En los años posteriores no encontré las ganas de rejugarlo, pero ahora con la excusa del emulador de PS4 y testear su rendimiento… La curiosidad me hizo volver a él.

Esta vez, pudiendo jugarlo más detenidamente y observando cada pequeño detalle en una tele más grande, he podido apreciar mejor sus virtudes, y ahora opino que es el mejor Souls (sin contar Sekiro) que hicieron en esa época.

Con la excusa de querer jugar Moonlight Syndrome, decidí comenzar por Twilight para tener un mejor contexto.

Fue una decisión acertada, puesto que me hizo disfrutar aún más de Moonlight cuando lo jugué.

Twilight Syndrome es una historia sobre rumores paranormales y un grupo de amigas siendo arrastradas a situaciones peligrosas cuando les pica la curiosidad por investigar cuál es la realidad detrás de esas historias.

En 2025 no es el juego que más miedo te va a dar, pero hay que tener en cuenta que este juego salió en el boom de los juegos que empezaron a incluir voice acting.

Caminar por la escuela de noche, tan solo escuchando el sonido de tus pisadas y de repente oír un ruido o la voz de un fantasma susurrante… Es el tipo de experiencia por la que uno debería jugar a este juego.

Mis escenarios favoritos fueron el de la clase de música y el de la estación de trenes.


Aviso para los que les interese jugar a esto mientras estudian japonés: El texto del juego avanza automáticamente pasado un tiempo. Los diálogos no tienen voice acting, así que recomiendo jugarlo en emulador e ir pausando poco a poco. (En el siguiente juego no hay problema con esto).

El primer Twilight Syndrome consta de dos juegos: Tansaku (Exploración) y Kyuumei (Investigación).

Originalmente iba a haber salido todo en una sola entrega, pero el desarrollo se complicó y tuvieron que dividirlo en dos partes (que salieron el mismo año).

Me gustaron el escenario de la broma telefónica y el de los túneles subterráneos.

Si sacas el mejor resultado posible en todos los escenarios de ambos juegos, desbloqueas un caso adicional que sirve de teaser para Moonlight Syndrome.

Este año se anunció un proyecto de traducción y romhacking de ambos Twilight Syndrome al inglés y español, así que puede merecer la pena esperar para jugar todo en conjunto.

Salvo por una vez que probé uno de los de Dreamcast, es el primero de la saga al que le he echado bastantes horas. Terminé el Early Access cuando salió y me pareció divertidísimo.

Debo decir que el motivo por el que me decidí a probarlo es porque vi que podía comprar mi coche, un Mazda 3 Hatchback.


Aunque no fuera el coche ideal para combatir contra los últimos jefes, al final acabé recurriendo a hacerme un RX-8 tuneadísimo y me lo pasé bomba yendo a 300km/h.

Después de terminar Umineko se nos quedó hueco ese rato por las noches en el que leíamos visual novels, así que nos adentramos en Higurashi.

Se toma su tiempo para establecer sus personajes e introducirte a los misterios, pero no se nos hizo nada largo.

En algún momento tenemos que retomar el segundo capítulo.

Otro de los juegos más fascinantes que he jugado este año.

Imagina ser motero y ganarte la vida haciendo reportajes fotográficos para tu página web de los años 2000.

El juego te suelta en la zona este de Hokkaido durante un mes y tienes total libertad para moverte en moto, visitar zonas turísticas, sacar fotos, entablar romances, acampar al aire libre y escribir un diario online.


Como punto negativo, diría que conforme llegas a la mitad del juego y te enganchas a la historia, el gameplay se hace un poco obstáculo y preferirías estar avanzando en la historia, en lugar de dar vueltas buscando sitios que no hayas aún visitado.

Saqué una de las rutas y espero volver en otra ocasión para ver el resto de finales.

Cada mes de agosto pruebo un Boku no Natsuyasumi distinto y hago lo de jugarlo a diario hasta el día 31.

Este año tocaba ir a los gigantescos campos de Hokkaido y cuidar vacas en la granja de nuestro tío.

Tiene escenarios muy bonitos y vistosos, pero diría que a veces el mapa me daba la sensación de no ser tan grande como los del resto. Comparándolo también con el segundo… ¿Tal vez echo en falta algún personaje más?

Fue mucha casualidad que el juego trate el tema de los osos salvajes y que este año se haya liado parda en Japón con este tema.

En general, un juego redondo si estás metido en esta franquicia y quieres vivir más vacaciones de verano.

Este fue mi primer Zelda, junto con la Collector’s Edition que venía con la GameCube.

El año pasado rejugué Ocarina of Time y me lo pasé por primera vez, una cosa que no conseguí cuando lo jugué con siete años. Fue una sensación reconfortante.
(Llegué super lejos, pero como el juego estaba en inglés, no entendía como conseguir la lupa de la verdad y me atasqué).

Por tanto, este año quería probar a rejugar este otro Zelda, el cual recordaba con cariño.

Quitando la movida de tener que cambiar la dirección del viento tocando la batuta, no se me hizo especialmente cansino, ni siquiera la búsqueda de la Trifuerza, de la cual sí que tenía algún recuerdo aburrido.

Pude probar también el tema de Tingle y la Gameboy Advance, que siempre fue una cosa por la que tenía curiosidad.

Diría que ha envejecido bastante bien. Incluso lo recomendaría como un buen juego para practicar japonés porque incluye furigana y el vocabulario no es super rebuscado.

Un absoluto mindfuck.

Lo que es la historia general y los temas que aborda me han parecido super interesantes, e incluso me ha dado ganas de leer Subahibi en otro momento… Pero la cantidad de porno que tiene este juego no tiene salvación alguna.

Si alguien tiene interés en jugarlo, le diría que vaya con la idea de que va a encontrar escenas un tanto desagradables.

Lo más fuerte que tiene este juego, junto con la historia, son las CGs, que siempre van durísimas y dan verdadero mal rollo.

Mentiría si no dijera que he jugado esto para acabar el año con un número redondo de juegos acabados.

Lo tenía pendiente de jugar y es que literalmente dura una hora, pero es una hora divertidísima y que no me gustaría spoilear a nadie. (No pongo imágenes ni vídeos sobre él para no revelar sorpresas)

En el apartado de gameplay, es un side scroller donde tienes que ir lo más rápido posible venciendo enemigos para mantener el momentum y evitar frenarte. Hay escenas que duran más que la mayoría de niveles del propio juego.

Recomendadísimo si eres fan de Suda51 y Grasshopper Manufacture. (Qué ganas de que salga Romeo is a Deadman).